Cada latido de mi corazón te pertenece.

Cada movimiento que haces, cada palabra que dices, cada vez que respiras, cada vez que te caes, cada vez que te levantas, cuando ríes, cuando gritas, cuando te enfadas, cuando estas en otro mundo, cuando miras a la nada, cuando miras a alguien, cuando andas, cuando corres, cuando pestañeas, cuando finges una sonrisa, cuando te desesperas, siempre te estoy observando. Estoy enganchada a ti, estoy enganchada a la película de tu vida, tal vez algún día, deje de ser la antagonista, para volver a tener el papel principal.